ÈNÌ TÍ KÓNDÀKÈ ORÒ SÍSÒ, DÍ ALÁHÌFÓHÙN NÍGBÀTÍ ONRÌNÀNRÌ EGÙN.
El que nunca cesa de hablar calla cuando camina a través de espinas.
Comentario: El culto a los Òrìsà está basado en la creencia en el poder de la palabra. Por esta
razón, quienes veneran a los Òrìsà en Africa son cuidadosos sobre lo que dicen y cómo lo dicen.
En la cultura yorùbá no existe la conversación ociosa. Todas las palabras y afirmaciones se ven
como invocaciones y expresiones de voluntad. Las afirmaciones de carácter negativo se consideran
maleficios en el sentido literal de la palabra.
Cualquiera que habla indiscretamente se considera irresponsable y hay una creencia de que
una tendencia tal puede llevar a problemas. La conversación ociosa se considera una forma de
automaleficio que atrae experiencias negativas hacia la persona que se complace en esa práctica. El
sentido del proverbio es que hay un tiempo para hablar y un tiempo para la contemplación. Cuando se
está viajando a través de espinas, es claramente un tiempo para la contemplación basada en la
observación. Esto es cierto sea que esas espinas estén en el bosque o en aquellas situaciones
"espinosas" que requieren introspección antes de la acción
RELIGION AFROCUBANA YORUBA Y RELIGION YORÙBÀ TRADICIONAL, ABAKUA, PALO, CONGO, SANTOS, ESPIRITISMO.
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sábado, 23 de abril de 2011
ÒWE ( PROVERBIOS YORÙBÁ )
Ò W E
P R O V E R B I O S Y O R Ù B Á
A. ONÍWÀ FUNFUN – PROVERBIOS YORÙBÁ Y EL CONCEPTO DE LA VERDAD
"Owe" es la palabra yorùbá que significa “proverbio". En la disciplina teológica, un proverbio se
define como un dicho corto que expresa una verdad religiosa o cultural. Todas las culturas hacen uso
de los proverbios para trasmitir valores sociales. Como una introducción a la comprensión de los
Òrìsà (Espíritus que guían las Fuerzas en la Naturaleza), los proverbios yorùbás proveen una base
para captar la visión de Ifá de la relación entre el self y el Mundo.
Muchos de los proverbios que están en uso corriente en la cultura yorùbá están basados en las
Escrituras de Ifá. Esta Escritura es un extenso poema oral formado de doscientas cincuenta y seis
secciones, o libros, llamados "Odù". Cada Odù tiene una cantidad de versos llamados "esè". En el
Odù llamado Osa'Tùrá, los estudiantes del profeta Òrúnmìlà le piden que les diga la naturaleza de la
Verdad. La palabra yorùbá para "Verdad" es "Oníwà funfun", que significa "uno que posee buen
carácter es guiado por la luz".
En el Odù Osá'Tùrá, Òrúnmìlà dice que la Verdad es el Jefe del Reino Invisible que guía el
Destino de la Tierra. Continúa diciendo que la Verdad es una palabra que nunca puede echarse a
perder; es la fuente de poder que vence toda la adversidad. Los que conocen la Verdad pueden
descubrir la Voluntad de la Creación. Esto implica que la Verdad es una manera de conocer más bien
que un conjunto de creencias rígidas. También implica que la Luz, como una Fuerza de la Naturaleza
(Òrìsà), porta su propia forma de conciencia que puede tener un impacto directo en el curso de la
evolución. Estos son dos temas centrales en las Escrituras de Ifá, y son elementos clave para
comprender la naturaleza y función de los Òrìsà desde la perspectiva de la teología de Ifá.
Dentro de la estructura del ritual de Ifá, el Odù Osa'Tùrá se usa para invocar a Esù, quien es a
la vez el Mensajero Divino y el Guardián de la Verdad. Este papel dual ha causado alguna confusión
entre aquellos que han escrito sobre la posición de Esù en la cosmología de Ifá. La confusión parece
estar basada en un malentendido del papel de Esù en causar trastornos. Una de las funciones del
trastorno natural en los asuntos cotidianos es sacudir a la conciencia para soltarla de su
autoindulgencia y pensamiento rígido. Debido a que la Tierra está constantemente en proceso, todas
las percepciones de la relación entre self y Mundo están en un estado constante de flujo. Aquellos
que niegan o ignoran la naturaleza dinámica de esta relación son periódicamente arrojados a un
estado de confusión como resultado de algún giro inesperado de los acontecimientos. En términos
simples, la percepción humana de la Verdad es una dimensión constantemente cambiante y una de las
funciones de Esù es recordarnos que la búsqueda humana de la Verdad nunca debe estancarse.
Decir que Esù es el Guardián de la Verdad es sugerir que la Verdad nunca puede volverse un
conjunto fijo de reglas o de dogma. En cambio, la Verdad es un modo de mirar al self y al Mundo;
es un estado de ser más bien que un acto de conocer. Este es un concepto difícil de captar para
algunos occidentales, pues hemos sido condicionados por la idea de que la Verdad se establece por
hechos objetivos. La idea de que la Verdad sólo puede ser descubierta si somos periódicamente
sacudidos de nuestras nociones preconcebidas es perturbadora para quienes quieren que la religión
tenga la totalidad de las respuestas correctas sobre cualquier cosa.
Cuando los misioneros cristianos tradujeron por primera vez la Biblia al yorùbá utilizaron la
palabra Esù para representar al "Diablo". Sin duda éste fue un intento deliberado de rebajar la creencia
religiosa tradicional de Ifá. El efecto de esta calumnia es aún evidente en los Estados Unidos donde
Esù es a menudo asociado con la idea de causar daño por medio del uso de magia y hechicería. Una
mirada más cercana a los proverbios yorùbás, a su folklore e historia sagrada sugiere que el daño
hecho por Esù es el resultado del rechazo de una persona a vivir en armonía con la Verdad como se
refleja a través de las Leyes de la Naturaleza.
Los proverbios incluidos en este capítulo son una pequeña muestra tomada de una cultura que
es rica en el uso poético del lenguaje. Muchos de estos ejemplos utilizan analogías
interdimensionales e imágenes de la Naturaleza que no se usan comúnmente en el lenguaje coloquial.
Esto lleva a una situación en la cual el significado original del proverbio puede no estar claro sin
alguna referencia a las creencias espirituales y sociales de Ifá. Como con todos los proverbios, no hay
ninguna interpretación única y definitiva de su significado. Los proverbios que apuntan a la Verdad
están continuamente abiertos a la reinterpretación. Es su capacidad para sacudir las nociones
preconcebidas hasta dejarlas sueltas lo que les da la fuerza de una revelación.
P R O V E R B I O S Y O R Ù B Á
A. ONÍWÀ FUNFUN – PROVERBIOS YORÙBÁ Y EL CONCEPTO DE LA VERDAD
"Owe" es la palabra yorùbá que significa “proverbio". En la disciplina teológica, un proverbio se
define como un dicho corto que expresa una verdad religiosa o cultural. Todas las culturas hacen uso
de los proverbios para trasmitir valores sociales. Como una introducción a la comprensión de los
Òrìsà (Espíritus que guían las Fuerzas en la Naturaleza), los proverbios yorùbás proveen una base
para captar la visión de Ifá de la relación entre el self y el Mundo.
Muchos de los proverbios que están en uso corriente en la cultura yorùbá están basados en las
Escrituras de Ifá. Esta Escritura es un extenso poema oral formado de doscientas cincuenta y seis
secciones, o libros, llamados "Odù". Cada Odù tiene una cantidad de versos llamados "esè". En el
Odù llamado Osa'Tùrá, los estudiantes del profeta Òrúnmìlà le piden que les diga la naturaleza de la
Verdad. La palabra yorùbá para "Verdad" es "Oníwà funfun", que significa "uno que posee buen
carácter es guiado por la luz".
En el Odù Osá'Tùrá, Òrúnmìlà dice que la Verdad es el Jefe del Reino Invisible que guía el
Destino de la Tierra. Continúa diciendo que la Verdad es una palabra que nunca puede echarse a
perder; es la fuente de poder que vence toda la adversidad. Los que conocen la Verdad pueden
descubrir la Voluntad de la Creación. Esto implica que la Verdad es una manera de conocer más bien
que un conjunto de creencias rígidas. También implica que la Luz, como una Fuerza de la Naturaleza
(Òrìsà), porta su propia forma de conciencia que puede tener un impacto directo en el curso de la
evolución. Estos son dos temas centrales en las Escrituras de Ifá, y son elementos clave para
comprender la naturaleza y función de los Òrìsà desde la perspectiva de la teología de Ifá.
Dentro de la estructura del ritual de Ifá, el Odù Osa'Tùrá se usa para invocar a Esù, quien es a
la vez el Mensajero Divino y el Guardián de la Verdad. Este papel dual ha causado alguna confusión
entre aquellos que han escrito sobre la posición de Esù en la cosmología de Ifá. La confusión parece
estar basada en un malentendido del papel de Esù en causar trastornos. Una de las funciones del
trastorno natural en los asuntos cotidianos es sacudir a la conciencia para soltarla de su
autoindulgencia y pensamiento rígido. Debido a que la Tierra está constantemente en proceso, todas
las percepciones de la relación entre self y Mundo están en un estado constante de flujo. Aquellos
que niegan o ignoran la naturaleza dinámica de esta relación son periódicamente arrojados a un
estado de confusión como resultado de algún giro inesperado de los acontecimientos. En términos
simples, la percepción humana de la Verdad es una dimensión constantemente cambiante y una de las
funciones de Esù es recordarnos que la búsqueda humana de la Verdad nunca debe estancarse.
Decir que Esù es el Guardián de la Verdad es sugerir que la Verdad nunca puede volverse un
conjunto fijo de reglas o de dogma. En cambio, la Verdad es un modo de mirar al self y al Mundo;
es un estado de ser más bien que un acto de conocer. Este es un concepto difícil de captar para
algunos occidentales, pues hemos sido condicionados por la idea de que la Verdad se establece por
hechos objetivos. La idea de que la Verdad sólo puede ser descubierta si somos periódicamente
sacudidos de nuestras nociones preconcebidas es perturbadora para quienes quieren que la religión
tenga la totalidad de las respuestas correctas sobre cualquier cosa.
Cuando los misioneros cristianos tradujeron por primera vez la Biblia al yorùbá utilizaron la
palabra Esù para representar al "Diablo". Sin duda éste fue un intento deliberado de rebajar la creencia
religiosa tradicional de Ifá. El efecto de esta calumnia es aún evidente en los Estados Unidos donde
Esù es a menudo asociado con la idea de causar daño por medio del uso de magia y hechicería. Una
mirada más cercana a los proverbios yorùbás, a su folklore e historia sagrada sugiere que el daño
hecho por Esù es el resultado del rechazo de una persona a vivir en armonía con la Verdad como se
refleja a través de las Leyes de la Naturaleza.
Los proverbios incluidos en este capítulo son una pequeña muestra tomada de una cultura que
es rica en el uso poético del lenguaje. Muchos de estos ejemplos utilizan analogías
interdimensionales e imágenes de la Naturaleza que no se usan comúnmente en el lenguaje coloquial.
Esto lleva a una situación en la cual el significado original del proverbio puede no estar claro sin
alguna referencia a las creencias espirituales y sociales de Ifá. Como con todos los proverbios, no hay
ninguna interpretación única y definitiva de su significado. Los proverbios que apuntan a la Verdad
están continuamente abiertos a la reinterpretación. Es su capacidad para sacudir las nociones
preconcebidas hasta dejarlas sueltas lo que les da la fuerza de una revelación.
domingo, 3 de abril de 2011
Orígenes Yoruba
Los orígenes de la cultura yoruba
En la región forestal de la franja costera que se extiende entre el Volta y Camerún se asentaron comunidades rurales que dominaban la técnica del hierro y organizaron una economía agrícola y formas de vida avanzadas y estables. Entre las más importantes estaban las comunidades yoruba, cuyo grupo central, localizado en las regiones de Ife, Ilesha y Ekiti, parece ser el establecimiento más antiguo.
Un movimiento de dispersión protagonizado por los grupos que impusieron su supremacía económica, política y cultural sobre los territorios ocupados.
Reinos o estados
Los reinos yoruba, constituidos en los territorios habitados por las comunidades de esa etnia -al sur de la actual Nigeria-, deben a ello su homogeneidad lingüística y cultural y el reconocimiento de sus antepasados fundadores. El esplendor alcanzado por dos de los reinos, Ife y Oyo, se extendió a las tradiciones de los demás reinos.
Hay una cosmogonía basada en el mito de Ife que ubica en la ciudad de Ile-Ife la creación de la Tierra y otra que se levanta sobre el mito de Oyo y atribuye a una migración proveniente del este los orígenes yoruba. Lo cierto es que la vida de estos reinos promovió la difusión de instituciones y prácticas entre sus poblaciones y que la ejecución satisfactoria de complejas funciones -agricultura extensiva, comercio de largas distancias, sistemas de tributación, expansión militar, políticas ciudadanas- fue posible por la existencia de estados bien provistos y debidamente organizados.
Aunque cada rey aspiraba a dejar a su sucesor un reino más extenso, una política tolerante favorecía un clima de intercambio del cual salían culturalmente enriquecidas las comunidades vencedoras y las asimiladas. Dicho intercambio explica, finalmente, la heterogeneidad que se aprecia en la civilización yoruba. Una cultura cuya unidad se realiza a través de la diferencia.
Vida económica
Los estados yoruba tenían por lo general dimensiones modestas. A veces abarcaban una sola ciudad y sus aldeas vecinas. Es una excepción el reino de Oyo, que se extendió a vastos territorios y adquirió status imperial. Lo común era una población agrupada en asentamientos compactos en torno a la casa de los reyes y mayores en un área rodeada por una muralla que fijaba sus límites. Tenían recursos provenientes de la agricultura, de cierta actividad extractiva y de la artesanía. Concurrían a mercados locales organizados en días alternos para contrarrestar la competencia entre mercados vecinos. Pero artículos de lujo (oro que fluía a las cortes en forma de tributo, marfil, piezas artísticas, nueces, y otros) eran el objeto principal de un comercio de largas distancias, establecido, por ejemplo, con los estados haussa, de las zonas orientales, cuyos beneficiarios directos eran los estratos más ricos -los reyes y sus cortes, funcionarios, comerciantes y profesionales-. En las comunidades más desarrolladas había esclavos -a causa de crímenes y deudas- que trabajaban como servidores domésticos o como peones agrícolas en las tierras comunales.
Entre los yoruba de las sociedades tradicionales no se practicó el comercio de esclavos. Sin embargo, la historiografía da cuenta de la existencia de un comercio de esclavos que probablemente se inició en el siglo XV.
A partir del siglo XVI la trata de esclavos originó una migración forzosa hacia las Américas de las poblaciones africanas y de sus culturas. Un complejo de formas de pensamiento y de civilización de origen yoruba se desarrolló en Brasil, en Cuba y en otros pueblos de las Antillas.
La cosmovisión
Un antiguo mito, que revela cómo se transponen al tiempo mítico las determinaciones del tiempo histórico, supone que de Ife, ciudad sagrada, se dispersaron los nietos de Oduduwa -fundador legendario- y que sus nombres dieron a su vez nombre y origen a la primera generación de estados yoruba: Owu, Ketu, Benín, Illa, Sabe, Popo y Oyo.
La cosmogonía yoruba se basa en la idea de una entidad superior, integrada por tres deidades. La primera de ellas creó el mundo, que inicialmente sólo estaba poblado por santos (orixás)(orisas)(orichas). Posteriormente repartió su poder (aché)(ase) entre los orichas, que en adelante son los encargados de intervenir en los asuntos humanos y de abogar por los hombres gracias a la mediación del juez supremo o mensajero principal, Orunmila.
Como en la mayoría de las lenguas del Africa Negra, "el poder" se expresa entre los yoruba mediante una palabra -aché-que significa "la fuerza", no en el sentido de violencia sino en el de energía vital que engendra una polivalencia de fuerzas y determina desde la integridad física y moral hasta la suerte.
En todas las creaciones culturales del conjunto de sus pueblos está contenida la cosmovisión yoruba. Propia de sociedades donde toda acción es realizada, interpretada y vivida como parte de un todo ontológico orgánico -y no precisamente religioso-, esta cosmología encierra la idea de que el orden de las fuerzas cósmicas puede ser perturbado por acciones inmorales cuyo efecto es desequilibrante y perjudicial para la humanidad, para la naturaleza y para sus autores.
La unidad entre naturaleza y ética constituye en estas culturas una determinación cósmica y consiguientemente un principio para el ejercicio del poder, una condición de su aplicación benéfica. Los cuentos tradicionales de la cultura yoruba entrañan generalmente el castigo para los gobernantes despóticos y para los irreverentes con las fuerzas de la naturaleza.
Vida comunitaria
La noción de fuerza está presente además en el ideal que anima la vida de la comunidad y asimismo, la de cada uno de sus individuos: "Defenderse de toda disminución de su ser, acrecentar su salud, su forma física, la dimensión de sus campos, la magnitud de sus rebaños, el número de sus hijos (o ahijados), de sus aldeas.
La comunidad tenía mucho valor en las culturas tradicionales yoruba. Determinaba su concepción de la historia -identificada con la vida del grupo en continuo cambio- y del tiempo -concebido como el tiempo social, vivido por el grupo, que trasciende el tiempo de la persona y que es, a la vez, la dimensión donde el hombre puede y debe entablar incesantemente su lucha contra la decadencia y por el enriquecimiento de su energía vital.
Los yoruba pensaban que a lo largo de la historia vivida por el grupo se acumulaba un aché que se encarnaba en objetos. En calidad de atributos de los orichas, estos objetos se trasmitían desde los ancestros a las comunidades sucesivas a través de sus patriarcas o reyes, intermediarios entre el mundo trascendental y el mundo visible.
Aunque estaban encabezadas por reyes, las comunidades eran dirigidas por consejos de gobierno en los cuales entraban hombres de diversa condición y donde los ancianos gozaban de una dignidad merecida. Las yoruba, como la mayoría de las comunidades tradicionales africanas, eran sociedades de opinión pública, en las cuales la conducta de las autoridades era vigilada, espiada, y las violaciones de los principios que regían la vida comunitaria se denunciaban siempre mediante críticas y rumores verbales persistentes, tan agobiantes que, a la larga, su autor se encontraba en la obligación de explicarse o dimitir.
No debe olvidarse el lugar de las mujeres, cuya autoridad era manifiesta en los límites de la comunidad.
La religión
La religión de las sociedades yorubas tradicionales se caracteriza por el culto a un dios superior y a un conjunto de divinidades intermedias, cuya intervención y voluntad rige la vida humana. Los orichas fueron ancestros que en vida acumularon un poder y un saber sobre las fuerzas naturales y humanas en virtud del cual transitaron un día de la condición de hombres a la de dioses. Cada uno personifica ciertas fuerzas de la naturaleza y se asocia a un culto que conducen a los creyentes a ofrecer alimentos, sacrificios y oraciones para aplacar sus iras y atraerse sus favores.
La religión yoruba está ligada a la noción de familia en el sentido de que cada culto engendra una hermandad religiosa que se deriva justamente del oricha o antepasado común, la cual abarca a los vivos y a los muertos y supera los vínculos de sangre.
Los dioses yoruba recuerdan a los del panteón helénico. Pero aquéllos, en la liturgia, se posesionan de los fieles. En estado de posesión, el dios baila con sus adoradores en complaciente camaradería y a veces habla, adivina, aconseja y profetiza. Entre los más conocidos orichas se cuentan Eleggua Esu Exu -el dios que abre el camino y que en las casas de Cuba,Brasil se coloca detrás de las puertas-;En África generalmente no todas las casas lo poseen, Oggún -inventor de la fragua, dios de los minerales y las montañas y del dinero-; Oxosi Ochosi -dios de la caza-; Xangó Changó Sangó -el Marte de los yoruba, dios del fuego y de la guerra-; Oxún Ochún Osún -la diosa del agua dulce, del amor,de la maternidad y de toda dulzura-; Iemanyá Yemaya Iemonja -la reina del mar-.
El arte yoruba
El arte de las comunidades yoruba más antiguas se distinguió por sus creaciones escultóricas, alfareras y ceramistas. Sobresalen los bajorrelieves, las tallas en madera, y las máscaras y cabezas humanas creadas con la técnica del "moldeado a la cera perdida", celosamente conservada como herencia divina.
Sin embargo, el lugar preponderante en el arte yoruba lo tiene la música. Aunque como forma de arte tiene una significación autónoma y profana, la música está indisolublemente unida a los cultos religiosos y a la liturgia yoruba.
Lo más característico es el predominio de los tambores y especialmente la presencia de los tambores batá (familia), una creación exclusiva del pueblo yoruba. Es una orquesta de tres tambores -Iyá (madre), Itótele y Okóngolo- percutidos a la vez por tres tamboreros. Para los yoruba "los batás hablan lengua" y cada uno de sus toques -sagrados (toques de batá) o no (toques de bembé)- se inspiran en leyendas atribuidas a los orichás.
A la música de los batá se unen coros y danzas litúrgicas. Los coros secundan a los tambores y las danzas son ejecutadas por bailadores que imitan las fuerzas naturales y los poderes atribuidos a los orixás.
La integridad sonora y sinfónica de los batá (sonoridad vegetal, por la madera de los tambores; animal, por los cueros con que se sujetan y afinan; mineral, por el conjunto de cascabeles y campanillas), unida a las voces humanas, obedece a un criterio mágico por medio del cual los yoruba evocaban la integridad de las potencias cósmicas
Recordemos de estar unidos por el bien de nuestra Cultura.
Yeimer Arango Ojuani Boche ( Owonrin Ose )Barcelona España.
En la región forestal de la franja costera que se extiende entre el Volta y Camerún se asentaron comunidades rurales que dominaban la técnica del hierro y organizaron una economía agrícola y formas de vida avanzadas y estables. Entre las más importantes estaban las comunidades yoruba, cuyo grupo central, localizado en las regiones de Ife, Ilesha y Ekiti, parece ser el establecimiento más antiguo.
Un movimiento de dispersión protagonizado por los grupos que impusieron su supremacía económica, política y cultural sobre los territorios ocupados.
Reinos o estados
Los reinos yoruba, constituidos en los territorios habitados por las comunidades de esa etnia -al sur de la actual Nigeria-, deben a ello su homogeneidad lingüística y cultural y el reconocimiento de sus antepasados fundadores. El esplendor alcanzado por dos de los reinos, Ife y Oyo, se extendió a las tradiciones de los demás reinos.
Hay una cosmogonía basada en el mito de Ife que ubica en la ciudad de Ile-Ife la creación de la Tierra y otra que se levanta sobre el mito de Oyo y atribuye a una migración proveniente del este los orígenes yoruba. Lo cierto es que la vida de estos reinos promovió la difusión de instituciones y prácticas entre sus poblaciones y que la ejecución satisfactoria de complejas funciones -agricultura extensiva, comercio de largas distancias, sistemas de tributación, expansión militar, políticas ciudadanas- fue posible por la existencia de estados bien provistos y debidamente organizados.
Aunque cada rey aspiraba a dejar a su sucesor un reino más extenso, una política tolerante favorecía un clima de intercambio del cual salían culturalmente enriquecidas las comunidades vencedoras y las asimiladas. Dicho intercambio explica, finalmente, la heterogeneidad que se aprecia en la civilización yoruba. Una cultura cuya unidad se realiza a través de la diferencia.
Vida económica
Los estados yoruba tenían por lo general dimensiones modestas. A veces abarcaban una sola ciudad y sus aldeas vecinas. Es una excepción el reino de Oyo, que se extendió a vastos territorios y adquirió status imperial. Lo común era una población agrupada en asentamientos compactos en torno a la casa de los reyes y mayores en un área rodeada por una muralla que fijaba sus límites. Tenían recursos provenientes de la agricultura, de cierta actividad extractiva y de la artesanía. Concurrían a mercados locales organizados en días alternos para contrarrestar la competencia entre mercados vecinos. Pero artículos de lujo (oro que fluía a las cortes en forma de tributo, marfil, piezas artísticas, nueces, y otros) eran el objeto principal de un comercio de largas distancias, establecido, por ejemplo, con los estados haussa, de las zonas orientales, cuyos beneficiarios directos eran los estratos más ricos -los reyes y sus cortes, funcionarios, comerciantes y profesionales-. En las comunidades más desarrolladas había esclavos -a causa de crímenes y deudas- que trabajaban como servidores domésticos o como peones agrícolas en las tierras comunales.
Entre los yoruba de las sociedades tradicionales no se practicó el comercio de esclavos. Sin embargo, la historiografía da cuenta de la existencia de un comercio de esclavos que probablemente se inició en el siglo XV.
A partir del siglo XVI la trata de esclavos originó una migración forzosa hacia las Américas de las poblaciones africanas y de sus culturas. Un complejo de formas de pensamiento y de civilización de origen yoruba se desarrolló en Brasil, en Cuba y en otros pueblos de las Antillas.
La cosmovisión
Un antiguo mito, que revela cómo se transponen al tiempo mítico las determinaciones del tiempo histórico, supone que de Ife, ciudad sagrada, se dispersaron los nietos de Oduduwa -fundador legendario- y que sus nombres dieron a su vez nombre y origen a la primera generación de estados yoruba: Owu, Ketu, Benín, Illa, Sabe, Popo y Oyo.
La cosmogonía yoruba se basa en la idea de una entidad superior, integrada por tres deidades. La primera de ellas creó el mundo, que inicialmente sólo estaba poblado por santos (orixás)(orisas)(orichas). Posteriormente repartió su poder (aché)(ase) entre los orichas, que en adelante son los encargados de intervenir en los asuntos humanos y de abogar por los hombres gracias a la mediación del juez supremo o mensajero principal, Orunmila.
Como en la mayoría de las lenguas del Africa Negra, "el poder" se expresa entre los yoruba mediante una palabra -aché-que significa "la fuerza", no en el sentido de violencia sino en el de energía vital que engendra una polivalencia de fuerzas y determina desde la integridad física y moral hasta la suerte.
En todas las creaciones culturales del conjunto de sus pueblos está contenida la cosmovisión yoruba. Propia de sociedades donde toda acción es realizada, interpretada y vivida como parte de un todo ontológico orgánico -y no precisamente religioso-, esta cosmología encierra la idea de que el orden de las fuerzas cósmicas puede ser perturbado por acciones inmorales cuyo efecto es desequilibrante y perjudicial para la humanidad, para la naturaleza y para sus autores.
La unidad entre naturaleza y ética constituye en estas culturas una determinación cósmica y consiguientemente un principio para el ejercicio del poder, una condición de su aplicación benéfica. Los cuentos tradicionales de la cultura yoruba entrañan generalmente el castigo para los gobernantes despóticos y para los irreverentes con las fuerzas de la naturaleza.
Vida comunitaria
La noción de fuerza está presente además en el ideal que anima la vida de la comunidad y asimismo, la de cada uno de sus individuos: "Defenderse de toda disminución de su ser, acrecentar su salud, su forma física, la dimensión de sus campos, la magnitud de sus rebaños, el número de sus hijos (o ahijados), de sus aldeas.
La comunidad tenía mucho valor en las culturas tradicionales yoruba. Determinaba su concepción de la historia -identificada con la vida del grupo en continuo cambio- y del tiempo -concebido como el tiempo social, vivido por el grupo, que trasciende el tiempo de la persona y que es, a la vez, la dimensión donde el hombre puede y debe entablar incesantemente su lucha contra la decadencia y por el enriquecimiento de su energía vital.
Los yoruba pensaban que a lo largo de la historia vivida por el grupo se acumulaba un aché que se encarnaba en objetos. En calidad de atributos de los orichas, estos objetos se trasmitían desde los ancestros a las comunidades sucesivas a través de sus patriarcas o reyes, intermediarios entre el mundo trascendental y el mundo visible.
Aunque estaban encabezadas por reyes, las comunidades eran dirigidas por consejos de gobierno en los cuales entraban hombres de diversa condición y donde los ancianos gozaban de una dignidad merecida. Las yoruba, como la mayoría de las comunidades tradicionales africanas, eran sociedades de opinión pública, en las cuales la conducta de las autoridades era vigilada, espiada, y las violaciones de los principios que regían la vida comunitaria se denunciaban siempre mediante críticas y rumores verbales persistentes, tan agobiantes que, a la larga, su autor se encontraba en la obligación de explicarse o dimitir.
No debe olvidarse el lugar de las mujeres, cuya autoridad era manifiesta en los límites de la comunidad.
La religión
La religión de las sociedades yorubas tradicionales se caracteriza por el culto a un dios superior y a un conjunto de divinidades intermedias, cuya intervención y voluntad rige la vida humana. Los orichas fueron ancestros que en vida acumularon un poder y un saber sobre las fuerzas naturales y humanas en virtud del cual transitaron un día de la condición de hombres a la de dioses. Cada uno personifica ciertas fuerzas de la naturaleza y se asocia a un culto que conducen a los creyentes a ofrecer alimentos, sacrificios y oraciones para aplacar sus iras y atraerse sus favores.
La religión yoruba está ligada a la noción de familia en el sentido de que cada culto engendra una hermandad religiosa que se deriva justamente del oricha o antepasado común, la cual abarca a los vivos y a los muertos y supera los vínculos de sangre.
Los dioses yoruba recuerdan a los del panteón helénico. Pero aquéllos, en la liturgia, se posesionan de los fieles. En estado de posesión, el dios baila con sus adoradores en complaciente camaradería y a veces habla, adivina, aconseja y profetiza. Entre los más conocidos orichas se cuentan Eleggua Esu Exu -el dios que abre el camino y que en las casas de Cuba,Brasil se coloca detrás de las puertas-;En África generalmente no todas las casas lo poseen, Oggún -inventor de la fragua, dios de los minerales y las montañas y del dinero-; Oxosi Ochosi -dios de la caza-; Xangó Changó Sangó -el Marte de los yoruba, dios del fuego y de la guerra-; Oxún Ochún Osún -la diosa del agua dulce, del amor,de la maternidad y de toda dulzura-; Iemanyá Yemaya Iemonja -la reina del mar-.
El arte yoruba
El arte de las comunidades yoruba más antiguas se distinguió por sus creaciones escultóricas, alfareras y ceramistas. Sobresalen los bajorrelieves, las tallas en madera, y las máscaras y cabezas humanas creadas con la técnica del "moldeado a la cera perdida", celosamente conservada como herencia divina.
Sin embargo, el lugar preponderante en el arte yoruba lo tiene la música. Aunque como forma de arte tiene una significación autónoma y profana, la música está indisolublemente unida a los cultos religiosos y a la liturgia yoruba.
Lo más característico es el predominio de los tambores y especialmente la presencia de los tambores batá (familia), una creación exclusiva del pueblo yoruba. Es una orquesta de tres tambores -Iyá (madre), Itótele y Okóngolo- percutidos a la vez por tres tamboreros. Para los yoruba "los batás hablan lengua" y cada uno de sus toques -sagrados (toques de batá) o no (toques de bembé)- se inspiran en leyendas atribuidas a los orichás.
A la música de los batá se unen coros y danzas litúrgicas. Los coros secundan a los tambores y las danzas son ejecutadas por bailadores que imitan las fuerzas naturales y los poderes atribuidos a los orixás.
La integridad sonora y sinfónica de los batá (sonoridad vegetal, por la madera de los tambores; animal, por los cueros con que se sujetan y afinan; mineral, por el conjunto de cascabeles y campanillas), unida a las voces humanas, obedece a un criterio mágico por medio del cual los yoruba evocaban la integridad de las potencias cósmicas
Recordemos de estar unidos por el bien de nuestra Cultura.
Yeimer Arango Ojuani Boche ( Owonrin Ose )Barcelona España.
domingo, 2 de enero de 2011
LETRA DEL AÑO 2011 ILE IRE ESULONA
LETRA DEL AÑO 2011 ILÉ IRÉ ESULONA ESPAÑA.
Osogbo Ofo Lei Toshú. Intorí Kafetí Lerí.
Pérdida de todo un poco provocado por nuestra propia cabeza.
OJUANI IRETE.
I II
I II
II I
I I
Santo que gobierna: Oshún con la ayuda de Orunmila , Oduduwa, Obatala,Olocun, Shangó, Esu y Eggun.
Aladdimú a Oshún: Cinco Eyelé carmelitas (marronas).
REZO: OGUITI BABA OPECUO AOPOPO ADIFAFUN OLOFIN APARI ADIFAFUN PALACORE.
REZO: OQUITIB ABU OPECUN AOPOPO ADIFAFUN OLOFIN APARI ELLE LE LEBO PARACOLE ADIFAFUN AKUKO LEBO ADIE EKU LEBO.
EBBÓ:
Akukó fifeshu, cuatro Eyelé, iba, ilú, un saquito, cuatro ado ichú, oguede manzano, orí, efún y owó merinlogún.
Dice IFÁ:
Que tenga cuidado con la justicia, Ud. quiere embarcar y tiene que tener cuidado con un mal tiempo porque se puede ahogar, no se bañe en el mar ni en el río, Ud. está como aburrido y quiere cobrar una fortuna, Ud. tiene dos cortes de pantalones nuevos, Oshun lo quiere entregar a Elewá, si hay alguna tragedia no se meta a separar, Ud. pasó un susto en el mar o en el río, su padre tiene grado en lo militar, Ud. es de familia rica, Ud. va a decir una cosa y no le van a creer y cuando eso pase lo van a venir a buscar y entonces Ud. se va a sentar a pedir bastante dinero, Ud está bastante perdido.
Ud. tiene un corte de vestido con el que debe hacer ebbó con él, cuando vaya a hacer algo bueno no lo diga por que se le interrumpe el camino, dele gracias a Elewá y mándele a decir misa al Eggun que se lo pida y dele unyen a Egungun.
EBBÓ: Akukó meyi, adié meyi, ogueddé manzano, el corte de vestido, owó.
Dice IFÁ:
Que Ud. está pasando pena y trabajo y está muy mal de salud y suerte. Cuidado no vaya a ir a parar a casa ajena como ya le pasó en otro tiempo, porque los ángeles de usted están en guerra por desobediencia y descuido, haga la rogación para que no se acabe de ir su pareja que está muy despreocupada por usted, no se moje con agua de lluvia para que no se enferme, en estos días lloverá.
EBBÓ:
Akukó meyi, adié meyi fun fun, asho timbelara, aguona meyi, owó.
PATAKIN:
En la tierra de itaco, que es como la capital de la tierra de eguadó, vivía una familia real que tenía un hijo que se llamaba Ogase, porque allí a todos los que nacían les ponían el mismo nombre pero con distintos títulos y nombres (como en España, Alfonso Xll, Alfonso Xlll y otros). Este príncipe no le hacía caso a sus mayores, ni oía nada, sólo hacía lo que él quería y debido a eso sus mayores le dieron la espalda; pero él creyó que, como era grande y por el nombre que tenía, podía vivir, salió de su casa y se dirigió a otro lugar en el campo. Pero allí, mientras tuvo owó, tuvo amigos y aduladores. Cuando Shangó y Elewá le trastornaron sus asuntos se fueron separando de él, e incluso llegó el día en que sus contrarios fueron aquellos que antes le rendían homenaje. El muchacho, al verse con poco owó y en tan mal estado, se enfermó de tristeza y el cerebro se le desequilibró, ya no tenía casa porque la ina se la desbarató. Por eso decidió ir a casa de orunmila, quien le vió este oddun y después de darle muchos consejos y decirle lo que pasaba y por lo que era, le hizo ebbó con el poco dinero que le quedaba. Le dijo que lo pusiera en leri oke (el ebbó va en una igba o en un saquito), cuando el muchacho llegó al pié de la loma estaba cansado y Alacaso le cogió el ebbó, le dijo que la esperara pues ella se encargaría de entregárselo a Oduduwa y así lo hizo. Oduduwa sacó el ebbó del saquito y le dio la eran a Alacaso y dentro del saquito metió la riqueza que le iba a dar al muchacho. Le dijo a ella que se lo llevara a él y le dijera que fuera donde estaban sus padres y les pidiera perdón, debía hacerles un regalo o dar una fiesta para alegrarlos. Tenía que obedecer a sus mayores para que no peligrara, y que era la última vez que lo perdonaría. Alacaso así lo hizo, le dio el recado de Oduduwa y Obbatalá al muchacho junto con el saquito y fue así como el joven volvió a tener felicidad.
Aquí se le da al Santo fiesta y todo lo que pida.
PATAKIN:
Orumila le anuncia al Rey que su hijo no podía bañarse en el río ni en el mar porque había, para él un gran peligro, pero los guardianes le dijeron al Rey que no hiciera caso, que ellos estaban ahí para salvar a su hijo y que por lo tanto no le sucedería nada malo y así el hijo del rey fue a bañarse en el río y ocurrió que un gran peligro le acechaba y fue que un remolino se lo tragó y los soldados no pudieron hacer nada.
Cuando el Rey se enteró fue apresuradamente a ver a Orunmila pero ya era tarde.
PATAKIN:
Una vez fue un Awo a casa de Orunmila e hizo Ebbó con un gallo para Eshu y dos Eyeles fun fun que llevaría a donde quiera que él fuera, las metió dentro de un saco y después de mucho andar se encontró con tres guerreros y estos le preguntaron quepara donde él iba y les respondió que para (odo) de dicha tierra y también le preguntaron que si él no había visto un pájaro blanco y al momento de hacerle la pregunta pasó la lechuza, esa que va ahí es la valiente a lo que el Awo respondió: Yo también tengo dos, apretó los brazos y le dijeron las Eyele, salió y peleó. Los guerreros siguieron su camino y tan pronto llegaron a la ciudad, cundió la noticia en donde el rey se enteró, fue a mirarse y Orunmila mandó que cuanto antes se hiciera la limpieza y que su hijo el príncipe no se bañara en el río.
Cuando todo se iba a hacer llegaron los gurreros y alegaron que con ellos bastaba y sucede que al poco tiempo el príncipe fue a bañarse al río con tan mala suerte que en la parte más profunda se enredó con el lino.
Los guerreros trataron de pasar el río pero les fue imposible llegar hasta el príncipe, en eso se acordaron de el Awo y lo fueron a buscar encontrándolo subido a un árbol y este le dijo a los guerreros que para bajar tenían que darle un saco de dinero y se lo dierony cuando bajó del árbol hizo Ebbó y en una barca fue y tiró la cepa de plátanos junto al príncipe y este salvó la vida, al enterarse el Rey le hizo un gran regalo al Awo.
EBBÓ: Eyele, dos addié negras, akukó, una cepa de plátanos o de piña y owó mesan.
Santos a Recibir:
Los guerreros
Orunmila
Aye
Orisha aye
Orun
Olocun
Oduduwa
Ser agradecidos y respetar a nuestros padrinos
Intentar la reunificación familiar y religiosa
Hacer fiestas , dar tambores , cajones etc con frecuencia, según posibilidades económicas
Les deseamos un feliz y próspero 2011 y les invitamos a realizar las obras antes descritas,
Orestes Calzadilla, Ogbe Dandi.
Lázaro Arango, Irete Obara.
Angela Martínez, Iroso Ate.
Luis Enrique, Irete Suka.
Yeimer Arango, Ojuani Oshe.
Carlos Miranda, Ogbe Osa.
Oscar Colome, Oddibara.
Yuri Pérez, Oshe Niwo.
Papito, Iwori Obara.
Sergio Juncosa, Irete Suka.
Giosue Cecere, Ogbeyono.
Ruandi, Ikaogbemi.
Belén Arango , Ogbesa.
Sheyla Gómez, Ogbedi.
Yolanda Martínez, Ogbetua.
Arik Oquendo, Irete Juan Juan.
Odalis Monzón, Osayekun.
Pedro Soto, Irete Untelu.
Esteban Morales, Iroso Umbo.
Paloma Gala, Osalofogbeyó.
Hilda, Ogbeunle.
Hector Quintero Iroso Otura
Frank, Irete Untelu.
Miguel Angel Costa, Ogbe Ate.
Francisco Cecere, Iroso Ate.
Teresa cecere, Ojuani Shogbe.
Francisco Javier, Obara Dila.
Aroa, Obararete.
Angelica del Carmen, Osalofogbeyó.
Lians Blas, Osairoso.
Aloy Abreu, Osaika.
Yuri, Oturaniko.
Lluc Colome ,Iwori Ogbe.
Henry Zambrano, Iroso Obara.
Aloy, Irete Suka.
Alisandra, Irete Suka.
Ivan, Ika Junco.
Cecilia, Oturairá.
Hilda, Osalofogbeyó.
Alex, Osa Meyi.
Heriberto, Okana Yekun.
Euridis Savigné, Oddi Ogbe.
Carlos Fernandez, Arótèsá.
Javier llopis Ofun meyi
Juan Panadero Oche Okana
Frank Otura Sa
Paco Otura iroso
María Odi Ogunda
Rebeca Juncosa Oche Ika
Tony Juncosa Iroso Ogunda
FELIZ 2011.
Bibliografía aportada por: Yeimer Òwónrín Òsé, Ilé Iré Esulona.
Asesoramiento religioso: Yeimer Òwónrín Òsé, Ilé Iré Esulona.
Publicado por: Carlos Fernández “Patxuco” Arótèsá, Asaré Pawó, Ilé Iré Esulona.
Osogbo Ofo Lei Toshú. Intorí Kafetí Lerí.
Pérdida de todo un poco provocado por nuestra propia cabeza.
OJUANI IRETE.
I II
I II
II I
I I
Santo que gobierna: Oshún con la ayuda de Orunmila , Oduduwa, Obatala,Olocun, Shangó, Esu y Eggun.
Aladdimú a Oshún: Cinco Eyelé carmelitas (marronas).
REZO: OGUITI BABA OPECUO AOPOPO ADIFAFUN OLOFIN APARI ADIFAFUN PALACORE.
REZO: OQUITIB ABU OPECUN AOPOPO ADIFAFUN OLOFIN APARI ELLE LE LEBO PARACOLE ADIFAFUN AKUKO LEBO ADIE EKU LEBO.
EBBÓ:
Akukó fifeshu, cuatro Eyelé, iba, ilú, un saquito, cuatro ado ichú, oguede manzano, orí, efún y owó merinlogún.
Dice IFÁ:
Que tenga cuidado con la justicia, Ud. quiere embarcar y tiene que tener cuidado con un mal tiempo porque se puede ahogar, no se bañe en el mar ni en el río, Ud. está como aburrido y quiere cobrar una fortuna, Ud. tiene dos cortes de pantalones nuevos, Oshun lo quiere entregar a Elewá, si hay alguna tragedia no se meta a separar, Ud. pasó un susto en el mar o en el río, su padre tiene grado en lo militar, Ud. es de familia rica, Ud. va a decir una cosa y no le van a creer y cuando eso pase lo van a venir a buscar y entonces Ud. se va a sentar a pedir bastante dinero, Ud está bastante perdido.
Ud. tiene un corte de vestido con el que debe hacer ebbó con él, cuando vaya a hacer algo bueno no lo diga por que se le interrumpe el camino, dele gracias a Elewá y mándele a decir misa al Eggun que se lo pida y dele unyen a Egungun.
EBBÓ: Akukó meyi, adié meyi, ogueddé manzano, el corte de vestido, owó.
Dice IFÁ:
Que Ud. está pasando pena y trabajo y está muy mal de salud y suerte. Cuidado no vaya a ir a parar a casa ajena como ya le pasó en otro tiempo, porque los ángeles de usted están en guerra por desobediencia y descuido, haga la rogación para que no se acabe de ir su pareja que está muy despreocupada por usted, no se moje con agua de lluvia para que no se enferme, en estos días lloverá.
EBBÓ:
Akukó meyi, adié meyi fun fun, asho timbelara, aguona meyi, owó.
PATAKIN:
En la tierra de itaco, que es como la capital de la tierra de eguadó, vivía una familia real que tenía un hijo que se llamaba Ogase, porque allí a todos los que nacían les ponían el mismo nombre pero con distintos títulos y nombres (como en España, Alfonso Xll, Alfonso Xlll y otros). Este príncipe no le hacía caso a sus mayores, ni oía nada, sólo hacía lo que él quería y debido a eso sus mayores le dieron la espalda; pero él creyó que, como era grande y por el nombre que tenía, podía vivir, salió de su casa y se dirigió a otro lugar en el campo. Pero allí, mientras tuvo owó, tuvo amigos y aduladores. Cuando Shangó y Elewá le trastornaron sus asuntos se fueron separando de él, e incluso llegó el día en que sus contrarios fueron aquellos que antes le rendían homenaje. El muchacho, al verse con poco owó y en tan mal estado, se enfermó de tristeza y el cerebro se le desequilibró, ya no tenía casa porque la ina se la desbarató. Por eso decidió ir a casa de orunmila, quien le vió este oddun y después de darle muchos consejos y decirle lo que pasaba y por lo que era, le hizo ebbó con el poco dinero que le quedaba. Le dijo que lo pusiera en leri oke (el ebbó va en una igba o en un saquito), cuando el muchacho llegó al pié de la loma estaba cansado y Alacaso le cogió el ebbó, le dijo que la esperara pues ella se encargaría de entregárselo a Oduduwa y así lo hizo. Oduduwa sacó el ebbó del saquito y le dio la eran a Alacaso y dentro del saquito metió la riqueza que le iba a dar al muchacho. Le dijo a ella que se lo llevara a él y le dijera que fuera donde estaban sus padres y les pidiera perdón, debía hacerles un regalo o dar una fiesta para alegrarlos. Tenía que obedecer a sus mayores para que no peligrara, y que era la última vez que lo perdonaría. Alacaso así lo hizo, le dio el recado de Oduduwa y Obbatalá al muchacho junto con el saquito y fue así como el joven volvió a tener felicidad.
Aquí se le da al Santo fiesta y todo lo que pida.
PATAKIN:
Orumila le anuncia al Rey que su hijo no podía bañarse en el río ni en el mar porque había, para él un gran peligro, pero los guardianes le dijeron al Rey que no hiciera caso, que ellos estaban ahí para salvar a su hijo y que por lo tanto no le sucedería nada malo y así el hijo del rey fue a bañarse en el río y ocurrió que un gran peligro le acechaba y fue que un remolino se lo tragó y los soldados no pudieron hacer nada.
Cuando el Rey se enteró fue apresuradamente a ver a Orunmila pero ya era tarde.
PATAKIN:
Una vez fue un Awo a casa de Orunmila e hizo Ebbó con un gallo para Eshu y dos Eyeles fun fun que llevaría a donde quiera que él fuera, las metió dentro de un saco y después de mucho andar se encontró con tres guerreros y estos le preguntaron quepara donde él iba y les respondió que para (odo) de dicha tierra y también le preguntaron que si él no había visto un pájaro blanco y al momento de hacerle la pregunta pasó la lechuza, esa que va ahí es la valiente a lo que el Awo respondió: Yo también tengo dos, apretó los brazos y le dijeron las Eyele, salió y peleó. Los guerreros siguieron su camino y tan pronto llegaron a la ciudad, cundió la noticia en donde el rey se enteró, fue a mirarse y Orunmila mandó que cuanto antes se hiciera la limpieza y que su hijo el príncipe no se bañara en el río.
Cuando todo se iba a hacer llegaron los gurreros y alegaron que con ellos bastaba y sucede que al poco tiempo el príncipe fue a bañarse al río con tan mala suerte que en la parte más profunda se enredó con el lino.
Los guerreros trataron de pasar el río pero les fue imposible llegar hasta el príncipe, en eso se acordaron de el Awo y lo fueron a buscar encontrándolo subido a un árbol y este le dijo a los guerreros que para bajar tenían que darle un saco de dinero y se lo dierony cuando bajó del árbol hizo Ebbó y en una barca fue y tiró la cepa de plátanos junto al príncipe y este salvó la vida, al enterarse el Rey le hizo un gran regalo al Awo.
EBBÓ: Eyele, dos addié negras, akukó, una cepa de plátanos o de piña y owó mesan.
Santos a Recibir:
Los guerreros
Orunmila
Aye
Orisha aye
Orun
Olocun
Oduduwa
Ser agradecidos y respetar a nuestros padrinos
Intentar la reunificación familiar y religiosa
Hacer fiestas , dar tambores , cajones etc con frecuencia, según posibilidades económicas
Les deseamos un feliz y próspero 2011 y les invitamos a realizar las obras antes descritas,
Orestes Calzadilla, Ogbe Dandi.
Lázaro Arango, Irete Obara.
Angela Martínez, Iroso Ate.
Luis Enrique, Irete Suka.
Yeimer Arango, Ojuani Oshe.
Carlos Miranda, Ogbe Osa.
Oscar Colome, Oddibara.
Yuri Pérez, Oshe Niwo.
Papito, Iwori Obara.
Sergio Juncosa, Irete Suka.
Giosue Cecere, Ogbeyono.
Ruandi, Ikaogbemi.
Belén Arango , Ogbesa.
Sheyla Gómez, Ogbedi.
Yolanda Martínez, Ogbetua.
Arik Oquendo, Irete Juan Juan.
Odalis Monzón, Osayekun.
Pedro Soto, Irete Untelu.
Esteban Morales, Iroso Umbo.
Paloma Gala, Osalofogbeyó.
Hilda, Ogbeunle.
Hector Quintero Iroso Otura
Frank, Irete Untelu.
Miguel Angel Costa, Ogbe Ate.
Francisco Cecere, Iroso Ate.
Teresa cecere, Ojuani Shogbe.
Francisco Javier, Obara Dila.
Aroa, Obararete.
Angelica del Carmen, Osalofogbeyó.
Lians Blas, Osairoso.
Aloy Abreu, Osaika.
Yuri, Oturaniko.
Lluc Colome ,Iwori Ogbe.
Henry Zambrano, Iroso Obara.
Aloy, Irete Suka.
Alisandra, Irete Suka.
Ivan, Ika Junco.
Cecilia, Oturairá.
Hilda, Osalofogbeyó.
Alex, Osa Meyi.
Heriberto, Okana Yekun.
Euridis Savigné, Oddi Ogbe.
Carlos Fernandez, Arótèsá.
Javier llopis Ofun meyi
Juan Panadero Oche Okana
Frank Otura Sa
Paco Otura iroso
María Odi Ogunda
Rebeca Juncosa Oche Ika
Tony Juncosa Iroso Ogunda
FELIZ 2011.
Bibliografía aportada por: Yeimer Òwónrín Òsé, Ilé Iré Esulona.
Asesoramiento religioso: Yeimer Òwónrín Òsé, Ilé Iré Esulona.
Publicado por: Carlos Fernández “Patxuco” Arótèsá, Asaré Pawó, Ilé Iré Esulona.
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